"Miré y he aquí un caballo amarillo...

...y el que lo montaba tenía por nombre Muerte y el Hades le seguía"

Saludos compatriotas de ultratumba, soy yo, Walrus, y he renacido como "Muerte", ya que he tenido que practicarme el sepuku con una cucharilla de té para curarme del virus comunista que me afectaba, pero no os preocupéis, he vuelto más fuerte y más hardcore que nunca (en mi imaginación claro está).

¿Y como celebrar el retorno de un grande como yo? Pues con mierdas random, si señor, como diós manda.

He aquí la verdadera historia que nos ocultan a cerca de los malditos ponis retrasados que están tan de moda, nada más lejos de la realidad, es un nido de depravación a punto de prolapsarse colapsar:

                             

Destapamos de nuevo la verdad, esta vez sobre Minecraft, ese juego del que ya ha hablado uno de mis compañeros redactores, y que en resumidas cuentas es una puta mierda que induce al autismo en su máximo exponente.
Pues bien, no es tan inocente como lo pintan, no, lo cierto es que detrás hay toda una historia de odio y violencia, peor que las discusiones sobre doblajes en youtube, tema en el que no me quiero meter, pero solo dejaré caer que los doblajes latinos son una puta mierda infumable.
Pues bien, he aquí un documento que da prueba de mis palabras:

Para terminar, os dejo un pilar de nuestra sociedad, Furbaby, ¿cómo, que no lo conocéis? ¡Eso es porque sois chusma, so pedazo de ineptos hijos de mala madre gente de buena fe que no acostumbra a ver las mierdas que yo veo! ¡Y eso tiene que cambiar, mis mierdas son buenas, coño!
Y sin más dilación, la obra maestra, dividida en 2 partes interactivas en las que podréis decidir qué mierda le pasa a nuestro amigo furbaby:

Parte A:
http://www.newgrounds.com/portal/view/554386
Parte B:
http://www.newgrounds.com/portal/view/554389

Ala, ya me he desfogado, y que sepáis que mi retorno nada ha tenido que ver con el secuestro de mi familia o la ejecución pública de mis concubinas, que ha sido un acto altruista con el que espero complaceros.

PD: ¿Podéis devolverme ya a mis hijos, compañeros redactores? Porque sin las piernas que me mandasteis no creo que duren mucho...